La Asociación de Comerciantes del Casco Viejo de Bilbao es la agrupación comercial del corazón de la Villa, las Siete Calles (Zazpi Kaleak, en euskera), el centro comercial urbano, abierto y peatonal más grande de la cornisa cantábrica. Reúne a comercios de todo tipo, desde moda y calzado a hogar, artesanía, joyería o farmacia, entre muchos otros, así como a locales hosteleros y diversos servicios como banca o turismo.
Desde su fundación en 1969 –lo que le convierte en la agrupación comercial más antigua del Estado–, la misión de la Asociación de comerciantes es la de velar por los intereses de los comerciantes del Casco Viejo, además de trabajar por el fomento e impulso del enclave más antiguo de Bilbao, así como de su revitalización social y urbanística.
Por eso, a lo largo de todos estos años, la Asociación de Comerciantes ha sido agente activo y fundamental en la transformación del Casco Viejo, declarado Monumento Histórico-Artístico. Además de por la promoción comercial, la Asociación destaca por la negociación permanente con las instituciones, con el fin de conseguir un Casco Viejo cómodo, cuidado, apacible y moderno.
Por ello, también, sigue trabajando en iniciativas y actividades de todo tipo que la convierten en un colectivo comercial dinámico. A lo largo del año, así, organiza acciones comerciales, culturales, sociales, gastronómicas, entre otras muchas, que animan a participar tanto a los propios comerciantes como a los muchos visitantes, de modo que el Casco Viejo se convierte en un foco fundamental de vida cultural y social, además de comercial.
Entre las acciones más destacadas, figuran la decoración lumínica de sus calles en Navidad, la organización del Ganga Market, el mercado de gangas más grande y antiguo de Euskadi, algunos concursos gastronómicos pioneros, ferias agroalimentarias, actos y eventos de todo tipo, así como numerosas campañas que tienen el fin de reforzar el atractivo comercial de la zona histórica de Bilbao. La agenda del Casco Viejo, por tanto, está repleta de actividades.
Casi en la clandestinidad nació esta asociación comercial, que en 1969 buscó un resquicio legal en la recién creada ley de asociaciones, que permitía las de vecinos, para constituirse como tal.
Fue ya en 1979 cuando se rebautizó al amparo de la nueva Ley de Asociación Profesionales. Desde entonces, centenares de comercios forman parte de un agente imprescindible en la vida del Casco Viejo y de todo Bilbao.
Entre sus hitos, destacan el trabajo para la revitalización de la zona tras la riada que 1983 asoló el Casco Viejo. La Asociación, en colaboración constante con las instituciones, logró que el Casco Viejo pasara en unos años de la tragedia al triunfo. El Casco Viejo, tal y como lo conocemos hoy, -peatonal, cuidado y activo- es fruto, por tanto, de un trabajo colaborativo en el que los comerciantes tuvieron mucho que ver.